Las orquídeas son consideradas una de las flores más bellas del mundo. Sus sépalos son sugerentes y mezcla sensualidad y belleza en una sola flor. La orquídea más popular es la de flores blancas que simboliza pureza. Es por ello, que existe gran variedad en color, exotismo y costo según el número de varas. En las Floristerías de Bogotá existen grandes ofertas para todos los gustos, ya que el clima favorece su conservación; la orquídea representa un regalo de gran pureza, elegancia y buen gusto. Existen 6 factores a tomar en cuenta para su cuidado:
- Luz.
Cómo hemos explicado arriba, la orquídea es muy exigente en luz, pero esta no debe ser directa, lo ideal es colocarla en una ventana orientada al norte, o tras una cortina que filtre la luz. Recuerda, viven en los árboles, y no reciben luz directa, así que han desarrollado una manera muy ingeniosa para poder aprovechar al máximo toda esa luz: realizan la fotosíntesis también en las raíces. Por eso es importante que el recipiente deje pasar la luz, es decir, que sea transparente.
- Agua.
Lo ideal para las orquídeas son riegos abundantes y espaciados, garantizando el drenaje del exceso de agua entre los riegos. La forma más fácil de conseguir este efecto es sumergiendo la maceta (sin llegar a mojar la parte superior ni las hojas) en un recipiente con agua durante 10 minutos, y dejándola escurrir después para eliminar el exceso de agua del sustrato. Este proceso lo podemos realizar una vez a la semana, o cuando las raíces empiecen a mostrarse grises. No mojes nunca el núcleo donde se juntan las hojas, ya que se estanca y provoca que estas se pudran. Es mejor regar por la mañana, ya que por la noche las temperaturas son más bajas y tarda más en evaporarse.
- La Temperatura.
Al ser una planta tropical necesita temperaturas estables que no pasen de los 30ºC ni bajen de los 15ºC. Para provocar la floración es importante provocar un cambio de temperatura de 10ºC entre el día y la noche.
- La Ventilación.
Las orquídeas necesitan ambientes bien ventilados y oxigenados, sin embargo, no soportan bien las corrientes fuertes de aire. La falta de ventilación puede provocar la aparición de hongos y otras enfermedades.
- El Sustrato.
El sustrato preparado para orquídeas epífitas es la mejor opción, ya que garantiza un drenaje y una aireación excelente, dejando espacio para el desarrollo de las raíces en sus cavidades.
- El Fertilizante.
El sustrato sobre el que crecen las orquídeas no contiene nutrientes, ya que simula su ambiente natural, la corteza de los árboles. Por ello resulta necesario abonar periódicamente nuestra orquídea. Los nutrientes más importantes para las plantas son el Nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K). Los fertilizantes deben incluir en su composición sus concentraciones de nitrógeno, fósforo y potasio, generalmente expresado de forma numérica en este formato: (30:10:10) o (10:30:20) siendo los números las proporciones de cada nutriente en este orden (N: P: K), es decir, el primer número se refiere al nitrógeno, el segundo al fósforo y el tercero al potasio.